Llego con un sentimiento de seguridad, sin miedo se podría decir... Sin saber qué vendrá, pero seguro que será para mí, me he acoplado muy bien.
El frío está bien, de hecho me gusta, puedo comprar cosas para coquetearle. Es otra cultura, otro idioma, lo importante es rápidamente comprenderla y no tomarlo personal, ciertos gestos, ciertos ademanes, hasta la forma de socializar, entender que somos distintos.
Poco a poco caigo en la cuenta que he cambiado de vida, que no tengo lo que solía tener, me veo privado de algo que algún tiempo tuve, algún tipo de privacidad, algún tipo de libertad, pareciera estoy más libre, a veces es cuándo más atrapado me siento... algún tipo de movilidad e independencia, ciertos lujos, cierto estilo de vida... esta privacidad me ha hecho ver distinto, aún un poco más distinto de lo que ya veía, o tal vez ha venido a reafirmar ciertas existencialidades.
Lo que sí es que he venido a crecer, -en estatura lo dudo-, como persona seguro y el estar acá era necesario para lo que vendrá. Hay cosas que no me gustan, pero es lo que se tiene, no todo ha sido ni será color de rosa, no todo ha sido lindo, pero pesa más lo lindo que lo que no me gusta... siempre! Y lo mejor es que depende de nosotros, depende de uno mismo el color del lente con el que queremos ver la historia. No solo en primavera es necesario detenerse a ver el pasto crecer, cómo las flores brotan, cómo el sol brilla y trae vida, dentenerse por un momento, tan solo por un momento y trasladarse a dónde no existe el tiempo, en dónde se vuelve una dimensión más y nos encontramos de frente, necesario renacer de las cenizas, como el ave Fénix, pero más importante aún reconocerlo, diferenciarlo, vivirlo.
Importante creer en algo... siempre creer en algo o alguien, Dios, Ser Supremo, Creador, energía... como le llamemos, poco a poco las respuestas llegarán. Vivir de sueños? Siempre me ha pasado y seguro seguirá pasando, siempre me han movido, es parte de creer en algo, es parte de vivir o desvivirse por algo, ir tras ese sueño... de alguna forma el corazón y la razón saben qué camino seguir, una corazonada le decimos a veces, lo más importante es dar el primer paso y creer que vamos en el camino correcto para lograrlo. No parar, aprovechar la inercia y todo se dará poco a poco, todo encajará y será como se esperaba o quizás mejor.
Hoy los días son más largos, me dan más tiempo de ver con claridad, las noches se hacen más cortas y mi tiempo de pensar se modifica... el balance entre luz y oscuridad, se hace más largo, al igual que el ciclo. No puedo predecir el futuro. Las respuestas a mis por qué, llegarán de una u otra forma en cierto tiempo y al ver hacia atrás todo tendrá sentido.
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