Hay un instante en el día en el que converge toda la energía del universo y pasa por vos??? Eso creo haberlo escuchado de uno de esos libros de metafísica y esos rollos que nos metemos a querer comprender creyendo que vamos a poder y lo que logramos en muchos casos es salir con más incógnitas que con las que entramos... Lo que sí es cierto nos sirve tanto para encontrarnos con nosotros mismos y sacar las mejores escencias que portamos a diario.
Pero cuando meditás en cualquier lado y no en uno en específico o antes de dormir por ejemplo... el único instante que he experimentado hasta ahora es ese instante en el que estás taaaan compenetrado con vos, en el que estás hablando taaaan profundamente con vos que crees no ser vos y una X situación te interrumpe aaaaahhhhhhhhhh.
Si no es el teléfono, es el avión, la bocina del camionetero, el temblor o no falta el tipo/a que quiere indagar más en ese instante tan único que es tuyo y no lo queres compartir con nadie y te pregunta: Que pasó? Se te fue el pájaro? y te saca por completo del trance en que te encontrabas. A veces no se como se verá la sonrisa fingida que expresa mi rostro.
Y es ahí donde las palabras sobran, donde ese gesto que hacés expresa más de un millón de palabras, donde te das a entender, como cuando no exisitía el idioma y todo era a través de señas. Como la seña que le hice al camionetero, cuando de una forma tan sutil, sacó mi mente de mi ser.
Se hace necesario convivir y compartir, pero algunos abusan... y pareciera que no te dan tu espacio, y qué culpa tienen, me pregunto? Si no saben lo que pensamos o si?
Comentarios